Control de plagas en comunidades de vecinos

Mantener una finca en buenas condiciones higiénicas es siempre prioridad de los vecinos. No obstante, pese a una buena limpieza, en muchas ocasiones resulta imposible evitar la proliferación de una plaga. Cualquier plaga lleva consigo un malestar general y problemas de salud y, además, puede acarrear un coste importante. En este artículo de Denfor te vamos a dar los detalles acerca de cómo actuar ante una plaga y cuáles son los tratamientos que se pueden llevar a cabo.

¿Cómo actuar ante una plaga en una comunidad de vecinos?

En edificios y complejos residenciales es frecuente la aparición de plagas y organismos dañinos de todo tipo y resulta fundamental prestar atención a los principales focos donde se suelen encontrar, así como, garajes, trasteros, desagües, piscinas y jardines comunitarios.

Tras detectar una infestación, resulta esencial identificar el organismo al que se va a hacer frente, averiguar las causas que han provocado la plaga y llevar a cabo las medidas adecuadas. Junto con las inspecciones previas y las medidas oportunas, también es necesario un programa de seguimiento y control.

Si la plaga proviene de una vivienda, donde la plaga más común es la de cucarachas rubias, será el propietario o arrendatario del inmueble el que deberá de hacerse cargo de la desinsectación o fumigación oportuna. Cuando el piso es alquilado, el arrendador deberá encargarse de la desinfectación para que la vivienda se encuentre en condiciones óptimas de habitabilidad. Pero cuando la plaga es imputable al inquilino, será este el que tendrá que hacer frente al coste de la desinfección. Asimismo, si la plaga se produce durante las primeras semanas de habitabilidad de un arrendatario, es el propietario el que tiene que pagar el coste de desinfección.

Por el contrario, cuando el foco principal se encuentra en una zona común, el control de plagas será responsabilidad de los propietarios de la comunidad y el coste que conlleve deberá ser abonado por todos los vecinos, sin excepción.

Finalmente, si la plaga se encuentra en los alrededores del inmueble, se debería analizar si se trata de un problema atribuible al ayuntamiento.

Algunas de las plagas más comunes en comunidades de vecinos son las de ratas, cucarachas y hormigas.

Los insectos y roedores que proliferan en comunidades de vecinos provocan principalmente problemas de salud. Por ello, es necesario realizar un mantenimiento óptimo, realizar los tratamientos que sean necesarios para garantizar una correcta calidad de higiene y contar con empresas especializadas que apliquen los productos más indicados para cada caso.

Servicios de control de plagas

Según el diagnóstico de la plaga, la empresa de control de plagas contratada, puede llevar a cabo tres tipos de tratamientos: la desinfección, la fumigación y la desinsectación.

En cuanto a la desinfección, esta es una técnica que aplica productos químicos para acabar con microorganismos dañinos.

Por otro lado, la fumigación consiste en una técnica más tóxica y agresiva, de manera que antes de volver a habitar las diferentes viviendas del edificio, cabe asegurarse de que los niveles tóxicos hayan desaparecido.

Finalmente, la desinsectación se aplica en plagas de insectos y es una de las técnicas de control de plagas más habituales.

Ante un problema de plaga de ratas en el edificio se deben revisar las conexiones entre los desagües y tubos de saneamiento, las conexiones de estos con las arquetas, ya que suele ser ahí por donde entran para anidar en falsos techos y otras zonas de difícil acceso. Para acabar con la plaga, además de realizar el tratamiento de desratización adecuado, se deberán sellar y tapar los huecos que se encuentren para erradicar el problema.

El tratamiento para las cucarachas es la desinsectación. Estos insectos suelen ser más activos por la noche y suelen reproducirse en primavera y verano, de manera que es aconsejable llevar a cabo el tratamiento oportuno estos meses.

En cuanto a las plagas de hormigas, estas pueden aparecer por obras en comunidades o viviendas, en zonas de jardín, en plantas ornamentales, etc. Comen dulces y también productos cárnicos, por lo que es sumamente importante mantener las zonas comunes libres de residuos alimenticios y limpias. La plaga se puede controlar con el uso de productos biocidas.

Las plagas de insectos y roedores en comunidades de vecinos pueden suponer una seria amenaza para la salud de las personas y, además, puede conllevar una importante disminución del valor de la propiedad. En este sentido, si se detecta una plaga, es altamente recomendable contratar los servicios de una empresa especializada en control de plagas, que cuente con personal técnico cualificado. Asimismo, el responsable del tratamiento debe siempre informar al cliente acerca de las medidas de seguridad que se deben tomar antes, durante y después de cada proceso de actuación y siempre seguir los plazos de seguridad de obligado cumplimiento.

DENFOR pone a tu disposición los mejores profesionales cualificados y experimentados para ofrecer un plan de desinsectación eficaz y de calidad. Nuestros profesionales aplican protocolos científicos tomando primero las muestras y mediante cultivos establecen la técnica de actuación y la analítica de contraste que garantice la obtención de los resultados deseados.