Galeruca del olmo

El escarabajo del olmo se alimenta de las hojas del olmo tanto en estado larvario como adulto. Durante los meses de primavera, las hembras ponen en las hojas (parénquima) huevos, de los cuales emergen las larvas. Las larvas devoran las hojas vorazmente, mientras que los adultos las agujerean, sin tocar la epidermis del reverso y dejando intactas las nerviaciones. De esta forma, las hojas adquieren un tono marrón semitransparente y un aspecto esqueletizado.

La galeruca del olmo hiberna desde octubre hasta finales de mayo en las grietas que se encuentran en la corteza del tronco o entre las hojas secas del suelo. Cuando llega la primavera y con las primeras brotaciones, los adultos salen de su refugio y comienzan a comer las hojas. Se reproducen en poco tiempo y cada hembra puede llegar a plantar hasta 30 huevos detrás de una única hoja. Así, se forman larvas que por medio de la metamorfosis dan lugar a una segunda generación de adultos, se refugian para pasar el invierno o bien repiten el ciclo reproductivo dando lugar a pequeños escarabajos del olmo que se refugian bajo cobertizos, muros de piedra, etc. donde pasar la temporada de frío.

En la fase de larvas, la galeruca del olmo que acaba de eclosionar presenta un color negro y a medida que se va alimentando se aclara entre amarillo y verde, con oscuros tubérculos sobre los anillos. En la fase adulta el escarabajo del olmo presenta una tonalidad amarillenta con distintas bandas negras longitudinales localizadas en los élitros.

La galeruca transmite un hongo, científicamente conocido como ceratocystis ulmi, mortífero para los olmos. La enfermedad se conoce como grafiosis del olmo. La galeruca al comer las hojas del olmo trae consigo el hongo al llevar adheridas en su cuerpo las esporas de este y las va diseminando.

La grafiosis afecta a los olmos, especialmente a los Ulmus minor y Ulmus glabra y es una de las más complejas enfermedades del mundo vegetal. La enfermedad de los olmos por un hongo provoca una defoliación severa, disminuyendo la capacidad de fotosíntesis del árbol y generando un deterioro de este. Con ello, el árbol es susceptible de ser invadido por otros grupos de insectos y enfermedades.

Cuando el olmo es atacado por el hongo de la galeruca se observa la marchitez de las hojas y una tonalidad marrón, con aspecto esqueletizado. Las hojas están agujereadas, sin tejido tierno, de aspecto transparente.

Durante el ciclo anual del hongo, este en primer lugar invade el olmo sano y se expande por su xilema tras la alimentación y, en segundo lugar, el hongo coloniza el floema.

Para poder combatir la plaga del olmo, es necesario aplicar un tratamiento químico. Este tratamiento de la galeruca del olmo se debe llevar a cabo en primavera, cuando los adultos suben a la copa para comer, y en verano contra las larvas. Según las poblaciones se aplicará o no en ambos periodos. El tratamiento deberá aplicarse sobre la copa y el tronco.

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